Desde el norte nos llega de vez enc uando una bocanada de aire fresco que hace pensar que el cine aún tiene futuro y cosas que contar.
Esta historia es sin duda una de esas que merece mucho la pena ser atendida y no olvidada.
Al fin llega la tercera de este espectacular director llamado Xavier Dolan, soy debota desde su primera película "J'ai tué ma mère", su segunda "Les amours imaginaires" es una delicia para los sentidos y en este largo mas largo nos vuelve a presentar escenas llenas de mágia y personajes dignos de ser conocidos.