La idea es muy buena y la primera vez que ves el reloj y cómo funciona es muy chulo pero cuando van pasando los minutos y se repite lo mismo una y otra y otra vez para terminar siendo una lenta y absurda trama concluida de forma burda termina una un tanto decepcionada.
Confirmar que Justin Timberlake no es actor ni sirve para serlo y que Amanda Seyfried tampoco, la duda queda en ver si con actores hubiera ganado algo la película.
Así como con unos planos más trabajados y algún que otro efecto, al menos nos distraería de la que yo considero digna candidata para ganar todos los Razzies de este año.
